La poesía desarraigada
de Dámaso Alonso

El autor al alcance de lectores infantiles

Los Contadores de estrellas (Ciclo I Primaria)
Motivo viejo y sentimental (Ciclo I Primaria)
El niño y la cometa (Ciclo II Primaria)

Rosalía tiene quince años (Ciclo II Primaria)
Los consejos del tío Dámaso a Luis Cristóbal (Ciclo II Primaria)
Vida (Ciclo III Primaria)
Calle del Arrabal (Ciclo III Primaria)
Gozo del tacto (Ciclo III Primaria)

CICLO III PRIMARIA

Vida

Entre mis manos cogí
un puñadito de tierra.
Soplaba el viento terrero.
La tierra volvió a la tierra.

Entre tus manos me tienes,
tierra soy.
El viento orea
tus dedos, largos de siglos.

Y el puñadito de arena
-grano a grano, grano a grano-
el gran viento se lo lleva.

Dámaso Alonso. Oscura noticia.
Editorial Espasa-Calpe.
Colección Austral, núm. 1290.

 

Oscura noticia es un libro de poesía existencial en el que asoma su preocupación religiosa, su anhelo de espiritualidad y trascendencia y su angustia ante la muerte. Reconoce la necesidad de Dios, pero no está seguro de que, de confirmarse su presencia, tengamos garantizado su apoyo. Es un libro hecho de paradojas de fe y de dudas, de contradicciones y conflicto íntimo.

El poema "Vida" nos muestra algunas de estas ideas porque en sus versos vemos la angustia del poeta ante la fugacidad de la vida y la inevitable destrucción de nuestra existencia individual y el aniquilamiento del mundo. En esta ocasión sitúa simbólicamente el poder destructor del tiempo en los pulmones del viento que parece acabar con todo: el gran viento se lo lleva. Y juega con la imagen cercana y cotidiana de quien se agacha en la playa y toma entre sus dedos un puñado de arena no tanto para percibir todo su calor, finura y suavidad, como para disfrutar de su pertinaz huida, de su empeño en escurrirse entre nuestros dedos para volver al regazo de su madre-tierra:

Entre mis manos cogí
un puñadito de tierra.
Soplaba el viento terrero.
La tierra volvió a la tierra.

Esta fusión de la arena y la tierra esconde la auténtica simbiosis que se produce cuando un ser muere y su cuerpo -ya ceniza- se funde con el polvo universal que habita el planeta. Polvo somos y en polvo nos convertiremos indefectiblemente y de nada sirve tratar de escapar al destino. Parece que Dámaso deja entrever un cierto determinismo, una dramática dependencia del hombre respecto a su Dios que le tiene en sus manos y maneja a su antojo su suerte desde el origen del tiempo; nada se puede hacer ante la fuerza de ese gran viento que se lleva todas las vidas:

Entre tus manos me tienes,
tierra soy.
El viento orea
tus dedos, largos de siglos.

El ser humano no es más que un minúsculo granito de arena que forma parte de la humanidad y del cosmos y aunque parece que podemos tomar decisiones y emprender proyectos en el fondo estamos abocados al capricho irreductible del Gran Viento-Dios que todo lo domina, que separa los puñados de tierra cuando los ve demasiado unidos y que, en el momento fatal, los desmenuza y desintegra haciendo que cada uno se sienta solo y desprotegido:

Y el puñadito de arena
-grano a grano, grano a grano-
el gran viento se lo lleva