|
Madrid.
M. GIRON
Esta es una
de las conclusiones del Informe España 2009: una interpretación
de su realidad social, que ha llevado ha cabo la Fundación
Encuentro y que aborda seis grandes temas de actualidad: la laicidad y
su implantación en la sociedad, la situación económica, la aplicación
pedagógica de las TIC, el futuro de la mujer rural, el debate nuclear
y la necesidad o no de reformar el Senado.
El capítulo
dedicado a las TIC y la educación viene firmado por Luis Vílchez, profesor
de Psicología Evolutiva y de la
Educación de la Universidad Complutense educación. En
él se asegura que “es más rentable invertir en investigación educativa
que en dotar de ordenadores a un colegio”. También “sorprende que se gasten
enormes cantidades de dinero público en tecnología y se hagan esfuerzos
verdaderamente pírricos en investigar el impacto de esa tecnología en
los procesos de enseñanza-aprendizaje”, apuntan los redactores del estudio.
El informe
destaca que el 48% de los profesores asegura tener un dominio alto de
las TIC y uno de cada cinco afirma obtener resultados satisfactorios de
su uso en las aulas. Además, la inmensa mayoría, el 80%, afirma que el
uso de Internet y de las nuevas tecnologías en el aula contribuyen de
manera significativa a modificar las estrategias de aprendizaje de los
alumnos, hasta el punto de que se están generando entre los jóvenes “otras
formas de pensamiento y de configuración de sus procesos cognitivos”.
Suspensos
e Internet
Por
su parte, los alumnos aseguran estudiar mejor y aprender más fácilmente
gracias a las TIC, datos que son matizados por estudios realizados por
expertos que demuestran que los alumnos que suspendían sin usar Internet,
siguen haciéndolo con Internet, aunque mejoren el resultado en alguna
ocasión por la novedad de su uso en el aula y, en ocasiones, aprueban.
Por materias,
la asignatura que sobresale en la utilización de las tecnologías en el
aula es Conocimiento del Medio (100%), seguida de Inglés
(94%) y de Lengua (90%). Es significativamente alto su empleo también
en las demás asignaturas del currículo, ya que en la que menos se usa
es en Física y Química, y aún así alcanza un porcentaje del 63%.
En cuanto a
los recursos, en el 19% de los centros hay ordenador para cada alumno;
en el 25’5%, un ordenador para cada dos alumnos. El 39% dispone de pizarra
digital y el 71% de cañón para proyecciones. Estos datos indican “un buen
equipamiento, pero lejos aún de lo ideal”.
Respecto a
las ventajas de las TIC, los datos muestran que la situación de enseñanza-aprendizaje
creada con su uso propicia el aprendizaje cooperativo y genera un buen
clima en las relaciones profesor-alumno. Se produce una especie de complicidad
tecnológica, que en principio puede resultar beneficiosa para aprender.
Promesas
incumplidas
Por
otro lado, el informe denuncia que la “gran promesa incumplida” de las
tecnologías es que “permitían conocer” y no es así. Permiten acceder a
la información y facilitan la investigación, pero si todo eso no se acompaña
de reflexión, diálogo, y “digestión” de la información, aunque las TIC
estén dentro del aula y hasta se trabaje con ellas, no podrán funcionar
como verdaderas herramientas de aprendizaje.
Según los expertos,
la escuela necesita contenidos tecnológicos pensados expresamente para
ella. No hay que olvidar que la informática nació para la oficina y no
para la escuela. En los centros hacen falta unas TIC con finalidad directa
y expresamente didáctica. Por ejemplo, es necesario ahondar en los cambios
que se están produciendo en la “situación-clase” con la incorporación
de las nuevas tecnologías. Para ello, se requiere mayor investigación
educativa, asumiendo que es rentable solo a medio y largo plazo. Hay datos
que alertan sobre la verdadera efectividad de algunas inversiones, aunque
“son sistemáticamente ignorados desde los sectores políticos”.
Productos
más baratos
Otro
reto deseable es que las editoriales, junto con las Administraciones Públicas,
se comprometan a abaratar los productos relacionados con las TIC. Pero
“sobre todo hay que dar sustento pedagógico a las implementaciones tecnológicas”.
En este sentido, el profesor “es elemento clave” de todo el proceso. El
informe subraya la importancia de invertir en la formación continua de
los docentes, propiciando la estabilidad de las plantillas y creando entre
todos un “tipo de profesor nuevo, capaz de interactuar con sus colegas
y formando con ellos verdaderas comunidades de aprendizaje”.
En cuanto a
las familias, el informe las considera un factor clave. Padres y madres
deben saber lo que se hace y lo que no con las nuevas tecnologías en los
colegios, y “lo que cabe esperar razonablemente de todo ello”. Para ello,
es posible y necesario crear redes sociales familia-colegio.
|
|
|
|